Ya no es obligatorio el uso de la mascarilla en lugares cerrados (excepto en centros sanitarios y transportes), pero son más de dos años usándola. Pero sanitarios y profesionales del transporte, la llevan puesta constantemente. Además, en muchos trabajos, sobre todo de cara al público, los empleados la portan por precaución. El uso prolongado, durante toda una jornada laboral termina derivando en distintas dolencias. Por eso, hoy te explicamos los problemas más comunes derivados del uso prolongado de mascarilla.
¿Cuáles son los problemas derivados del uso prolongado de la mascarilla?
Como decimos, los efectos y consecuencias patológicas provocadas por llevar la mascarilla puesta mucho tiempo al día son diversos. ¡Te detallamos cuáles son y cómo prevenirlos!
La apertura de la boca para respirar cuando llevamos mascarilla ocasiona un aumento de la tensión mandibular. La zona de la articulación temporomandibular se ve afectada como consecuencia de la dificultad para vocalizar naturalmente, afectando a la movilidad de la mandíbula.
Con la mascarilla puesta es normal mantener una respiración forzada de forma constante y una sobrecarga de la musculatura de la mandíbula. Acciones que también terminan por provocar dolor de cabeza a quienes están obligados a llevar la mascarilla durante largos periodos de tiempo.
El uso continuado de la mascarilla también puede producir dolor de cuello y cervicales, precisamente a consecuencia de la tensión mandibular. De hecho, ha aumentado significativamente el número de pacientes que sufren bruxismo. La tensión de la mandíbula y el estrés genera esta patología que, a su vez, en muchos casos desemboca en patologías relacionadas con las cervicales.
Cómo prevenir estos dolores
- Siempre es recomendable llevar una mascarilla que sea de nuestra talla, con ajustable en la nariz y, por supuesto, colocarla correctamente
- Como sabes, el fabricante recomienda un tiempo máximo de uso (vida útil) para evitar el enrarecimiento del aire que respiramos. Haz caso a estas recomendaciones
- Respira de forma consciente, inspirando por la nariz y expulsando el aire por la boca. Así reducirás la sobrecarga mandibular y cervical
- Realiza ejercicios para destensar los músculos faciales y bucales y estiramientos de cuello para relajar la zona cervical
- Como medida preventiva y de recuperación para profesionales obligados a portar la mascarilla constantemente, es recomendable un tratamiento de fisioterapia
Si identificas alguno de estos problemas del uso prologado de la mascarilla, no dudes en contactar con nosotros para pedir cita. ¡Te atenderemos encantados para ayudarte a subsanar tu problema!